Mi hermano quería enseñarnos la ciudad histórica de Bath. Fuimos desde Southampton con su coche. Por el camino acabamos hartos de Queen.
Bath fue fundada como un complejo termal por los romanos bajo el nombre latino de Aquae Sulis (“las aguas de Sulis”), en 43 d. C., aunque la tradición oral sin ningún sustento sugiere que ya existía desde antes. Edgar el Pacífico fue coronado como rey de Inglaterra en la Abadía de Bath en el 973. Tiempo después, se popularizó por sus aguas termales durante la Época georgiana, lo cual propició una gran expansión y dejó un reconocido legado arquitectónico georgiano para cuya construcción se utilizó piedra de Bath.
Bath fue reconocida como Patrimonio de la Humanidad de la Unesco en 1987. La ciudad posee una gran variedad de teatros, museos y demás edificios de importancia cultural, lo cual ha contribuido a su desarrollo como destino turístico.
La abadía de Bath es uno de los mejores ejemplos de estilo gótico perpendicular del país. Tiene sus origines en el siglo VII aunque su aspecto actual en el que destaca su fachada con esculturas de ángeles que suben al cielo por dos escaleras de piedra, es de 1499.
La fuente de Rebeca
El Puente Pulteney es uno de los cinco puentes habitados que quedan en el mundo. Diseñado por Robert Adam, que se basó en el Puente Vecchio de Florencia y el Puente de Rialto de Venecia, esta maravilla finalizada en 1773 tiene varias tiendas a lo largo de ambas márgenes.
Łukasz jugando con la cámara.
Las Termas Romanas
Esta ciudad fundada hace más de 2.800 años por el rey Bladud, padre del rey Lear, tiene en The Royal Crescent de la arquitectura georgiana. Este enorme complejo diseñado por John Wood hijo, está formado por un conjunto de 30 casas construidas en el siglo XVIII.
